En la villa de Cariño, tradicionalmente y todavía en la actualidad, se han dedicado al negocio de la pesca. Es un pueblo de industrias conserveras, tal es así que siempre se ha dicho en Ortigueira -pueblos rivales con historia a veces desencontrada- que en Cariño "huele a pescado" -recuerdo este dicho de toda la vida-. Es una localidad muy cercana que perteneció hasta no hace muchos años al Concello de Ortigueira. En la actualidad tiene su Concello propio y, afortunadamente, sigue oliendo a pescado, pues de otra manera perdería una parte importante de su identidad.
En esta fantástica población marinera de colores pastel, existen varias empresas que se dedican a la producción y venta de productos del mar en conserva.
Cariño siempre merece una visita y ya de paso, si queremos degustar o comprar algún producto autóctono para proveer nuestra despensa y la de nuestros familiares y amigos, pues esta es una buena opción.
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